Una monja encargada del cuidado de los niños de un hogar de acogida, en la zona de Sopocachi, en el departamento de La Paz, fue enviada a la cárcel luego de ser imputada por el delito de violencia familiar.

La religiosa fue acusada por una extrabajadora de la casa de acogida, quien presentó pruebas a las autoridades donde sustentaba su acusación. En dicha prueba se observa que los niños son agredidos física y sicológicamente cuando era obligados a comer.

Los audios y fotografías llevaron al Ministerio Público a presentar la acusación formal, por ello la religiosa fue puesta ante un juez cautelar, quien determinó su detención preventiva por seis meses, en la cárcel de Obrajes.

Además de la monja, otras dos trabajadoras, una pediatra y una sicóloga, del hogar, también fueron acusadas de agresión, en tanto, ellas quedaron con detención domiciliaria y sin derecho a salida laboral.

La fiscal Daniela Cáceres indicó que en el hogar de acogida, 13 niños menores de cinco años vivían en el lugar, por lo que se indaga si todos fueron víctimas de violencia.

Cáceres explicó que el delito por el que fue imputada la monja, violencia familiar, se tipificó de esa manera, tomando en cuenta que son niños que pasaron a vivir en el lugar al estar en vulnerabilidad, sin padres ni familia.